Plaza Bizkaia, Bilbao
Fecha de proyecto: 2008
Características
Se trata de una fuente de nubes, una fuente sin lámina de agua. Se trata de una fuente de agua pura. Del agua más pura, que es la del cielo, la de las nubes.
Sobre las nubes se levanta un paisaje de varias esculturas negras. Son formas de un gran contenido orgánico (inspiradas en el mundo vegetal), pero pueden ser metáforas de montañas, de cumbres lejanas.
Se forma así una fuente paisaje. Una fuente que recuerda un jardín japonés. En el que por el efecto de su abstracción se consigue una lejanía cuya consecuencia es, paradójicamente, que nos acerquemos más a nosotros mismos. A la intensidad de lo que somos.
La textura y frescor del agua micronizada establece un mundo de sensibilidad, donde nos apetecerá tratar de atrapar con la mano la ligereza del agua de nube y la densidad del negro granito de las esculturas.
Se consigue una potenciación de las cualidades y calidades de ambos materiales de la fuente, las densas y pesadas sombras de piedra y la levedad de la nube que las retiene.
La fuente se puede atravesar en todas las direcciones, tanto si está en marcha la producción de nubes como si no. Prácticamente sólo se siente un frescor al atravesarla.
Una fuente ya no es artefacto que nos da de beber, sino un símbolo y una expresión de lo que somos. Pero sobre todo una fuente es una ocasión para acercarnos a la materia.
Propiedad/Cliente: Excmo. Ayuntamiento de Bilbao
Arquitectos: Lorenzo Fernández-Ordóñez
Escultor: Juan Asensio
Colaboradores: Adriana Rodríguez Ossio / Eduardo San Nicolás
Constructora: FHIMASA
Presupuesto: 300.000 €
Dirección de obra: Lorenzo Fernández-Ordóñez
Estado: Finalizado 2008